En ocasiones nos llegan consultas al SAT en las que nos indican que después
de una recarga o incluso después de sustituir el cartucho por uno original, las
líneas muy finas no se imprimen o no se llegan a ver bien definidas. Este problema de fácil solución, como veremos
a continuación, tiene su origen en las diferencias del polvo de tóner tanto
entre tóneres compatibles como en tóneres originales. Hemos de tener en cuenta
que el polvo de tóner para cada modelo de cartucho es diferente, cuando se
fabrica se prevén un determinado número de toneladas de un tóner con
determinadas características y con él después se fabrican cientos de miles de
cartuchos. En determinado momento se precisa fabricar mas polvo de tóner de ese
mismo modelo, pueden pasar meses desde el primer lote de fabricación hasta el
segundo y probablemente en este segundo lote se empleen componentes que aunque
iguales al del primer lote tienen pequeñas diferencias ya sea procedencia o de
comportamiento físico. Esto hace que un tóner de un primer lote no tenga por
que comportarse como el del segundo; de tal modo que esto se ve reflejado en
las impresiones. Todos habréis comprobado que dos cartuchos, aunque sean
originales, no imprimen exactamente igual; esto se hace bastante evidente en
las impresoras color.
Volviendo al tema, cómo vamos a solucionar el problema de las líneas finas?
Simple, haremos unos ajustes en la impresora.
En primer lugar hemos de asegurarnos que el modo de ahorro de tóner está
apagado en el panel de control o en el controlador de impresora. Por defecto
nunca estará activado, pero si no lo tenemos claro lo mejor es consultar el
manual de usuario de nuestra impresora;
si no tenemos a mano el manual, lo podemos descargar desde la web de
nuestra marca de impresora.
Una vez tenemos claro que el ahorro de tóner esta desactivado, comprobamos
la resolución de impresión. Si está en uso, fino que normalmente equivale a
2400 dpi, la cambiaremos a normal que
equivale a 600 dpi. Esto se hará del siguiente modo: nos vamos a
Inicio>Configuración> Impresoras y faxes, colocamos el puntero encima de
la impresora y pulsamos el botón derecho se nos abrirá un desplegable y
seleccionamos Preferencias de impresión. Se nos abrirá el cuadro de impresión
de la impresora y en él buscamos la opción de ajustar resolución, seleccionamos
el valor deseado, pulsamos Aplicar y Aceptar ; ya podemos verificar si la
impresión es correcta.
Os pongo un ejemplo de cuadro de control para una impresora Brother,
lógicamente según la marca y modelo de impresora que tengáis la imagen del
cuadro será distinta a la que veis, pero los paso a seguir para llegar a él son
iguales en cualquier marca.
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