A pesar de todas las
especulaciones sobre la supervivencia de la impresión frente al poder de las
herramientas de marketing digital, ésta sigue siendo una de las formas
privilegiadas para que las marcas se distingan del resto. Contrariamente a lo
que algunos quieren hacernos creer, las tendencias del marketing digital no han
eliminado la impresión. De hecho, se ha estado combinando con medios físicos,
generando un enfoque de marketing altamente efectivo que permite aprovechar lo
mejor de ambos mundos.
Con la aplicación del Reglamento
General de Protección de Datos y la saturación de las comunicaciones por correo
electrónico, se espera que se reanude la publicidad directa. Esta es sin duda
una buena noticia para los profesionales del marketing, especialmente cuando
los estudios de opinión muestran que el efecto de memoria de una pieza de
correo directo es mayor que el de una campaña digital. Según las encuestas
elaboradas por TrueImpact, el 75% de las personas pueden recordar una marca
después de haber sido expuestas a una promoción por correo directo, en
comparación con el 44% después de una promoción en línea. Además, Enthusem
-empresa de software para la personalización de marketing directo- reveló que
el 51% de los clientes potenciales prefieren que las empresas utilicen una
combinación de correo postal y correo electrónico.
¡Es el sobre lo que cuenta!
En general, se considera que lo
que importa es lo que hay dentro del sobre, pero en realidad es el factor por
el cual se pueden menospreciar las comunicaciones importantes, los materiales
promocionales y otros contenidos valiosos: el sobre en el que se encuentran
simplemente no destaca y no capta la atención del destinatario, que a menudo
termina en el reciclaje que aún no se ha abierto. Para asegurarnos de que lo
que está dentro del sobre tenga realmente un impacto, debemos recordar que la
primera pieza que ve el destinatario es el propio sobre. Correr a través de un
montón de correspondencia en sobres blancos no es emocionante en absoluto, pero
si se inserta un color vibrante o un diseño complejo, inmediatamente se obtiene
una pieza que destaca y al resultar atractiva anima al destinatario a abrirla
antes que el resto.
El poder del color
El color tiene una fuerte
influencia en la mente. Los diferentes colores transmiten diferentes emociones.
Mientras que el rojo puede evocar pasión, el naranja transmite energía, el
amarillo trae felicidad y el azul se asocia con confianza. Los comerciantes y
diseñadores han reconocido desde hace ya mucho tiempo el poder del color como
una potente herramienta para destacar, las empresas necesitan pensar en cómo
crear más diseños exclusivos con más de un sólo color ya que los sobres de un
solo color no son nada nuevo.
Hasta hace poco, añadir color y
diseños complejos significaba grandes volúmenes de impresión, altos costes y
largos tiempos de producción. Sin embargo, el paisaje ha ido cambiando. Los
clientes exigen cada vez más tiradas cortas y personalizadas, y las empresas de
artes gráficas deben tomar medidas para ampliar su oferta de servicios y crear
más valor para el marketing de sus clientes.
Al invertir en una impresora de
sobres que puede imprimir color en color, las reprografías y pequeños
proveedores de servicios pueden producir campañas de correo directo de bajo
coste con una ventaja competitiva real. Un activo aún más valioso es una
impresora que pueda imprimir en cinco colores, una excepción a la regla típica
de las impresoras de sobres.
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