Si hace unos días os informaba
que Lexmark abandonaba la fabricación de impresoras de tinta:
hoy amanecemos con la noticia que
Kodak se sube a este carro. Y es que la compañía americana que entro en bancarrota
en el año 2011, ya ha tenido ya que renunciar a la producción de cámaras
fotográficas como a su mítico papel de película (primero fueron las réflex en
2005 y ahora las digitales) que habían supuesto su “sustento económico” desde su
fundación en 1889.
Lógicamente, el ámbito de las
impresoras tampoco iba a ser una excepción. Y aunque Kodak también supo hacerse
un hueco en el mercado con impresoras de inyección de tinta realmente
económicas, la presión que ejerce Canon y HP en este sector es tan grande que, Kodak
al igual que ha hecho Lexmark, también
acaba de anunciar que dejará la producción de las mismas, consiguiendo así
ahorrarse más de 100 millones de dólares en costes.
Los más pesimistas también
auguran que en lo que queda de año, y en el próximo 2013, Kodak se verá también
obligada a reducir su plantilla considerablemente para que así pueda salir lo
antes posible de esta situación de bancarrota. Es más, en junio de este año,
también puso en subasta cientos de patentes correspondientes a su catalogo
tecnológico que podrían llegar a tener un valor de más de 3.000 millones de
dólares. En definitiva, habrá que estar atentos a los próximos meses para ver qué
futuro le depara a esta compañía creada por George Eastman.
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