miércoles, 23 de mayo de 2018

Cartuchos con tinta de soja


En la actualidad, los procesos para obtener tintas de impresión a través de los aceites de la oleaginosa están mejorando cada vez más. De esta forma, se producen mejores resultados ecológicos,  económicos y de alta calidad que hasta pueden superar a los derivados del petróleo. De hecho, en algunos países ya se utilizan comúnmente para los periódicos.

Todos conocemos la necesidad que existe en el mundo de sustituir y reciclar productos que puedan causar daño al medio ambiente y generar contaminación, al estar fabricados con recursos no renovables.

Desde los años 70, en Estados Unidos se han realizado trabajos científicos para colocar a la soja como un material de producción. Empezó integrándose a los usos en las harinas y granos, pero luego fue utilizándose en aceites. Estas investigaciones han logrado avances en biodiesel, diferentes tipos de plástico y finalmente, tintas para impresora a base de aceite de soja.

De hecho, a muchas personas les podrían resultar familiares algunas frases como “Este documento ha sido impreso sin uso de cloro” o “La impresión de este folleto está preservando el medio ambiente”, porque se han encontrado con hojas donde se ha plasmado tinta de soja. A raíz de esto, muchas instituciones dejan un pequeño aviso diciendo que su papelería es amigable con el cuidado del planeta, haciendo que sea de mayor calidad y bajo precio

Primeros grandes ejemplos de uso

La tinta de soja empezó a ser utilizada a gran escala por los medios impresos en Norteamérica. Al contemplar su notorio éxito, el director de un centro de investigaciones para la cartera agrícola de Estados Unidos (USDA) declaró que esta tecnología ayudaría a muchas empresas a tener productos brillantes a costos accesibles. Esto hizo que siguiera creciendo a lo largo de ese país, haciendo que más del 80 por ciento de la prensa utilizara tinta de soja para sacar sus diarios al público.

Hoy en día, el mercado de tintas para medios impresos en ese país se valora cerca de 1 billón de dólares, lo mismo con el de tintas de impresión para artes gráficas. Al contemplar estas cifras, muchas industrias han decidido dedicarle tiempo, dinero y trabajo a desarrollar tintas degradables, económicas sin mermar la calidad de sus resultados.

¿Qué es exactamente la tinta de soja?

Hasta ahora hemos explicado buena parte de su origen, para luego adentrarnos en la explicación de su concepto y proceso de obtención. Cuando se mezclan los aceites derivados de la soja como solventes con los pigmentos a la hora de elaborar tintas, se obtiene un material de calidad biodegradable y con poca toxicidad, que ha sido creado con un recurso renovable, con pocos compuestos orgánicos volátiles. Por supuesto, también se emplean otros aceites como girasol, cártamo o canola, pero en bajas medidas. Los productos elaborados con derivados del petróleo no podrían contar con estas condiciones.

Por tanto, en la composición de la tinta de soja, generalmente, nos encontramos un 80% de aceite con la menor cantidad de resinas posible (para reducir su precio) y un 20% de pigmentos. La razón para mantener estos porcentajes es para facilitar el reciclaje del papel, porque cuando sea procesado, la tinta de soja se soltará más fácil.

Alternativas al petróleo

Recordemos que las tintas no son los únicos subproductos que se han obtenido de la soja. Durante los años 70, hubo una crisis petrolera que trajo cierta incertidumbre financiera en muchas industrias, así que en esta época se empezaron a crear las alternativas frente a la escasez. De hecho, todo empezó cuando se empezaron a crear tintas a base de aceites vegetales, pero las principales empresas que trabajaban con químicos de origen agrícola decidieron emplear la soja como el ingrediente principal, resultando en este grandioso y útil invento.

Desde hace un par de décadas, los periódicos empezaron a buscar nuevas maneras de recortar gastos ante las bajas de publicidad y menor cantidad de ventas, a causa de las apariciones de nuevos medios de comunicación. Estas industrias vieron que estaban siendo muy dependientes de los aceites derivados del petróleo, pero tenían otra opción para mejorar sus costos, calidad y rendimiento, por eso empezaron a optar por la tinta de soja.

Una de las razones por las que decidieron mantener su uso, es porque las tintas a base de soja no se borran con facilidad, a diferencia de las demás tintas que se usan en la industria periodística.

¿Cómo la tinta de soja puede ser la responsable de escribir la historia?

Hay una productiva y necesaria tendencia por parte de los consumidores en todo el mundo para cuidar el medio ambiente. Con esto se busca incentivar que todo sea más “verde” promoviendo buenas prácticas y hábitos que ayuden al planeta. Gracias a esto, las empresas han buscado vías de fabricación que ayuden a este comportamiento, sin necesidad de comprometer el costo de sus productos.

Aquí ya nos encontramos con un importante cambio en el mundo, pero también está la razón de que los periódicos más reconocidos empezaron a imprimirse con tinta de soja, llevando lentamente esta tendencia hacia los hogares e impresiones domésticas.

Esto sucedió porque los consumidores comunes empezaron a evaluar las ventajas y desventajas de tener soja en los tóner y cartuchos. Como por ejemplo, los compuestos orgánicos volátiles son liberados, se extiende fácilmente a lo largo del papel y requiere la menor cantidad posible para imprimir. Posiblemente, una de las pocas desventajas que vemos ante las tintas de petróleo es el tiempo de secado, pero esto se debe a la naturaleza de su composición.

A partir de aquí, los consumidores finales interesados en cambiarse a la tinta de soja, han puesto en una balanza estas propiedades para encontrarse con buenas posiciones en cuanto a las comparaciones de precios y duración de la tinta. Por supuesto, para el uso completamente comercial y doméstico este es un concepto nuevo, pero poco a poco va en ascendencia en muchos hogares, especialmente al ver la poca cantidad de residuos que deja esta tinta, permitiendo al papel ser reciclado fácilmente.

Si tenemos que ponerle números a las ventajas de la tinta de soja, podemos ver que representa un ahorro del más de 60% en las páginas a color, en comparación con la impresión láser, obteniendo una calidad de imagen similar. Además, tendrías casi 10% de ahorro en energía eléctrica y más de 10% en gases de efecto invernadero, lo que significa que sería al menos 90% menos contaminante que las otras versiones disponibles en el mercado.

Conclusión: ¿vale la pena cambiarse a tinta de soja?

En una imagen general, el uso de tinta de soja empezará a impactar realmente el planeta cuando empecemos a usarla de forma masiva. Una vez que todos los textos producidos para el público utilicen este producto se combatirán los problemas de basura al ser tinta biodegradable.

Su uso promovería un estilo de vida “verde” con buenos resultados de impresión, manteniendo calidad y cuidando nuestro medio ambiente. Por esto es que la tinta de soja está creciendo en popularidad y su demanda va en ascendencia. Cada vez hay más opciones de colores y disponibilidad de marcas para hogares y oficinas. Sin duda, sería un excelente sustituto para la tinta derivada del petróleo en el futuro

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